Sin que haya acabado la crisis, el ‘banco malo’ ha decidido hacer casas o, más exactamente, acabar las que quedaron a medias. En 2014, la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) concluirá 130 promociones inmobiliarias con un total de 3.000 viviendas. Y también apostará por el alquiler.
Antes de anunciar que se bajaba el sueldo para cobrar algo menos de 300.000 euros anuales, la presidenta de la Sareb, Belén Romana, ha avanzado que durante este año destinará 100 millones de euros a concluir 130 promociones inmobiliarias con un total de 3.000 viviendas, pero también centrará su actividad en «apostar en el medio plazo por promover el alquiler» e incluso preparará suelo para su comercialización.
Con todo ello, el ‘banco malo’ pretende «dar un fuerte impulso» a su actividad comercial y convertirse en «uno de los cinco primeros operadores del mercado», pasando de vender 25 inmuebles al día como se consiguió en 2013 a unos 30 inmuebles diarios. «Los dos primeros meses del año nos permiten ser optimistas en esta tarea», ha avanzado Romana.
En su primera comparecencia ante la Comisión de Economía del Congreso desde que tomó posesión del cargo, Romana ha reconocido que el margen de beneficio que el ‘banco malo’ puede conseguir con la venta de sus inmuebles es «reducido», porque el traspaso de los activos ya se hizo a precios «ajustados a los del mercado de 2013», aunque no renuncia al objetivo del organismo de evitar que el rescate bancario cueste más dinero a los contribuyentes.