El baño suele ser una de las estancias más pequeñas de la casa. Y sin embargo hacemos bastante vida en su interior. Es un espacio imprescindible y no siempre conseguimos que sea un lugar grato. Como explica el canal de decoración y reformas de Fotocasa, tener un baño de dimensiones reducidas no tiene por qué significar renunciar a la comodidad y la belleza. Hemos de tener en cuenta factores como la iluminación, los muebles y sanitarios a colocar.
Los sanitarios
Para estancias pequeñas podemos optar por los váteres y lavabos volados que, al no tener pie, resultan muy ligeros y mucho más prácticos para limpiar. Para el lavabo, hay modelos más estrechos y con menos fondo de lo habitual. Además, suelen tener muebles de bajolavabo adaptados al tamaño de la pica. La ducha, mejor a ras de suelo, para que no agobie visualmente la estancia.
El mobiliario
Tener todo guardado y ordenado pasa por contar con un mobiliario adecuado, funcional, pero ligero. Lo mejor es aprovechar los rincones muertos y la altura de las paredes con armarios, estanterías, baldas y columnas. Los muebles bajolavabo pueden ser volados o llegar hasta el suelo. Lo ideal es optar por tonos claros: maderas claras o blancos.
Los colores
Los colores claros permiten que la luz se multiplique por la estancia y generan amplitud. De modo que los ideales son el blanco y otras tonalidades como los cremas, grises o los acabados en haya, pino y abedul. El toque de color lo darán las toallas, alfombras y albornoces, y objetos como portacepillos, jabones o cestos y cajas.
La iluminación
Un cuarto de baño pequeño necesita una planificación de las luces que permita desarrollar las actividades con comodidad y genere amplitud. Lo mejor, focos empotrables o plafones. Para la zona de ducha o bañera, una iluminación que no sea muy potente.