Según el Indicador de Confianza del Consumidor, que el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicó el lunes pasado, la confianza del consumidor ha crecido un 21,6 % en 2014 gracias a un aumento del 29,9 % en la valoración de la situación actual y del 15,4 % en las expectativas, aunque sigue indicando una percepción negativa de la realidad.
Pero, ¿y qué pasa con la vivienda? En este momento los precios están tocando fondo en muchas zonas, subiendo en algunas, pero bajando aún en otras. En vivienda nueva, según Sociedad de Tasación, el precio cayó un 2,2% en 2014, lo que representa una moderación del descenso que vive este mercado desde hace siete años. En la usada, según Idealista, el precio se sitúa en los últimos compases del año en los 1.594 euros por metro cuadrado, lo que supone un 5% menos que un año antes.
En este contexto, ¿qué percepción tienen los españoles? Las idea mayoritaria es que el precio de los pisos se va a estabilizar en 2015. Según el CIS, el 50,1% de los ciudadanos apuesta por ello. Sólo el 17,9% cree que la vivienda seguirá bajando y el 26,1% espera que suba.
Según Beatriz Toribio, responsable de estudios de Fotocasa, “la demanda de vivienda por parte del ciudadano medio español sigue siendo muy débil”. En este sentido, considera que la clave en 2015 estará en cómo evolucione la demanda de vivienda por parte del ciudadano medio.
Demanda débil o muy débil. Según el barómetro del CIS, sólo un 3,5% de los españoles dice tener planes para comprar una vivienda durante 2015. O como dice Toribio, “necesitamos que los españoles tengan una estabilidad económica que les permita plantearse la compra de una vivienda”.
Al respecto, Sociedad de Tasación reconoce que la renta real de las familias se mantendrá en niveles similares a los actuales, por lo que «continuará la dificultad para acometer la adquisición de una nueva vivienda». En ese sentido, prevé que la demanda de viviendas crezca a medida que aumente el nivel de empleo y el flujo de financiación.