En un momento como el actual, con la venta de viviendas bajo mínimos, son los bancos quienes más venden porque pueden hacer ofertas y descuentos con las que pocos pueden competir. O no. Porque tal vez no son los pisos “de banco” los más baratos, como se ha podido creer. A pesar de la caída del precio de la vivienda, la Asociación de usuarios de Bancos, cajas y seguros asegura que “la banca sigue manteniendo el precio de sus pisos por encima de los inmuebles vendidos por particulares”. Las viviendas de los bancos pueden, incluso, duplicar el precio del piso del particular.
La asociación ha comparado 96 inmuebles pertenecientes a las inmobiliarias de seis bancos (BBVA, Bankia, La Caixa, Banco Sabadell, Banco Santander y Banco Popular) y a vendedores particulares; es decir, 48 comparativas entre un piso de banco y otro de un particular con similares características y situado en la misma zona que el del banco. En 45 casos ha resultado ser más barato el piso del particular que el del banco y solamente en 3 ha resultado al contrario. Igual ocurre con el precio del metro cuadrado. La media del precio por metro cuadrado a la que los bancos están vendiendo sus pisos es de 1.244,40 euros. En cambio, la de los particulares es de 971,94 euros, un 21,89% más barato. En la comparativa, sólo en tres de los 48 casos ha resultado que el inmueble del banco tuviera un precio más bajo que el del ciudadano. En estos casos, el piso del banco se encuentra a unos 2.000 metros de las zonas céntricas o próximo a zonas universitarias, donde a los bancos les corre prisa vender las viviendas.
Los bancos optan por la estrategia de ofrecer precios que aparentan ser bajos, «con anuncios donde indican grandes rebajas en sus precios que inducen a error sobre la valoración del mismo», y obligan al comprador a visitarlos para comprobar el estado de los inmuebles. En cambio, aseguran, los anuncios de particulares muestran una gran cantidad de imágenes de la vivienda en donde se puede apreciar el estado de la misma, si necesita reforma lo indican en el anuncio, y la mayoría de ellos se entregan amueblados, lo que supone un ahorro de entre 4.000 y 6.000 euros como mínimo que cuesta amueblar una vivienda. Finalmente, cuando queremos saber las condiciones que ofrecen los bancos para contratar sus hipotecas, «nos encontramos que la información que ofrecen en sus páginas web es escasa o prácticamente inexistente». No tener fácilmente accesibles las condiciones básicas de los contratos hipotecarios va en contra de la Orden EHA/2899/2011, de transparencia y protección del cliente de servicios bancarios. Esta ley obliga a las entidades bancarias a facilitar en sus páginas web la ficha de información precontractual (FIPRE) sobre los prestamos hipotecarios.