Cuando las circunstancias no son favorables, siempre hay personas que sacan provecho de la adversidad. Ver oportunidades en mitad de una crisis es el lema de vida de muchos emprendedores.
Si eres una de esas personas a las que su empresa ha despedido recientemente, pero tienes la posibilidad de pedir la prestación económica, tal vez sea el momento de pegar el salto y emprender. El paro puede que sea, justamente, el empujón que necesitas, y éstas son tres maneras de utilizarlo para un fin empresarial:
El pago único, también conocido como “capitalización del desempleo”: esta medida facilita las iniciativas de empleo autónomo abonando en un solo pago el importe de dicha prestación por desempleo a las personas beneficiarias.
Se trata de una medida para fomentar y facilitar iniciativas de empleo autónomo entre personas que estén percibiendo la prestación por desempleo de nivel contributivo, abonando el valor actual del importe de la prestación que reste por percibir a aquellas personas beneficiarias que pretendan:
- Incorporarse de forma estable como socios/as trabajadores/as o de trabajo en cooperativas o en sociedades laborales ya constituidas, o constituirlas, aunque se haya mantenido un contrato previo con las mismas.
- Desarrollar una actividad como personas trabajadoras autónomas. No se incluirán en este caso quienes se den de alta como trabajadores/as autónomos/as económicamente dependientes, firmando un contrato con una empresa con la que hubieran mantenido una relación contractual inmediatamente anterior a la situación legal de desempleo o que pertenezca al mismo grupo empresarial de aquella.
- Destinar el importe a realizar una aportación al capital social de una entidad mercantil de nueva creación o creada en un plazo máximo de 12 meses anteriores a la aportación, siempre y cuando se vaya a poseer el control efectivo de la sociedad, se vaya a ejercer en la misma una actividad profesional y se produzca un alta en la Seguridad Social en el Régimen Especial de Trabajadores por Cuenta Propia o en el Régimen Especial de Trabajadores del Mar.
Consiste, en resumen, en recibir todo el paro que nos corresponda (o que nos quede por cobrar) para arrancar nuestro proyecto y utilizarlo de inversión inicial.
Compatibilizar el paro con ser autónomo: cobrar la prestación al mismo tiempo que ejercemos una actividad laboral. Sin embargo, sólo es posible durante un máximo de 9 meses.
También, y quizá esta sea la opción más desconocida, podemos utilizar el paro para abonar la cantidad correspondiente de la cuota de autónomo. De esta forma, recibiríamos del SEPE la cantidad correspondiente a la cuota de autónomo que deberemos pagar después a la Seguridad Social. Es necesario recordar que el primer año de autónomo existe una tarifa plana en esta cuota. Ésta consiste en el pago de 60€ mensuales de cuota, en lugar de los 283€ que corresponderían. Ahora bien, el SEPE nos pagará esos doscientos ochenta y tres euros que corresponderían, aunque nos acojamos a la tarifa plana. El SEPE nos abonará la cuota todos los meses hasta que se agote la prestación por completo. Esta situación podría interesar si nuestro proyecto no requiere una inversión inicial grande y no queremos pagar esos primeros años de cuota cuando no tenemos apenas ingresos.