El pasado jueves 28 de enero de 2016, las clínicas dentales de la entidad con nombre comercial FUNNYDENT, cerraron sus puertas de la noche a la mañana, dejando a todos sus clientes, empleados y proveedores con una situación comprometida.
Buena parte de sus clientes habían financiado distintos tratamientos dentales que, en el momento del sorpresivo cierre, aún no se habían finalizado. Así, los usuarios se sienten desprotegidos e indefensos sin más remedio que enfrentarse a numerosas dudas e incertidumbres. Por supuesto, permanecer pasivos ante esta inesperada situación no parece una solución aceptable.
Por ello, no dude en ponerse en contacto con nosotros, sin compromiso, ante cualquier duda que les pudiera surgir, ya que, desde GRUPO EM, ponemos a su disposición nuestros abogados y asesores jurídicos que les indicarán cómo deben actuar y qué camino han de seguir en defensa de sus intereses.”